The Collective Management Group, la compañía que representaba a Roselyn Sánchez, entabló una demanda en su contra por $168 mil dólares asegurando que la actriz no cumplió con todas sus obligaciones contractuales.

A a Roselyn no "le pande el cúnico" (como diría el Chapulín) y dijo que "cuando se hizo evidente que The Collective era incapaz de cumplir sus promesas y darle más valor a mi carrera, terminé con ellos".

Bien hecho, digo yo, quieren cobrar sin trabajar?