Katie Holmes debutó anoche en el teatro Gerald Schoenfeld en Manhattan, donde la actriz hacía su debut en Broadway con la obra de Arthur Miller "All my sons".

Según la prensa su actuación fue todo un éxito.

Por cierto, que una multitud de "metidos en lo que no les incumbe" se dieron cita anoche en las afueras del teatro utilizando máscaras y llevando carteles con frases como "Liberad a Katie", "La cienciología es una secta" y "Corre, Katie, corre" intentando convencer a la joven actriz de que abandone las ideas religiosas de su marido.

"No estamos protestando en contra de la obra de teatro, ni en contra de Katie", explicó un asistente a la revista OK!, "sólo queremos darle el valor para que abandone esto. La hemos visto en televisión y se ve muy triste, ha perdido mucho peso".

Bueno! Si está flaca, triste, opaca o lo que sea no es para tanto! Por qué no protestan para que arreglen el metro?